El Ego

El ego* es cómo un parásito sujeto con garras y dientes a la cabeza de una persona. Dicho individuo creerá que llevar aquél bicho es normal, ya que ha estado ahí desde que tiene memoria. Se ha acostumbrado al, a veces ligero y a veces punzante, dolor que implica llevarlo.
Si alguien reconoce el parásito e intenta quitarlo éste causará daño a su portador al intentar aferrarse a él. En consecuencia ésta persona se volverá molesta hacia tí a causa del dolor que acabas de provocarle. Así funciona el ego.
La única forma de deshacerse de él es aceptando su existencia y el daño que provoca en tu persona. Debes reconocer que son tus temores y la fuerte identificación con tus actitudes y creencias, tu necesidad de tener siempre la razón y de defender una postura inflexible las cosas que lo alimentan. El ego modifica tu conducta, te lleva a realizar acciones en su beneficio y protección. 
Una vez reconoces y aceptas lo anterior comienza un cambio en tu personalidad. Dejas de alimentar a tu ego, dejas de permitirle tomar decisiones por tí. Entonces el ego comienza a morir.
Nicolas Raymond - FreeStock.ca

Inspirado por: The Power of the Now. Eckhart Tolle.

* Entiéndase ego por egoísmo negativo. Existe otra forma de egoísmo denominado positivo, el cuál es generador de bienestar emocional.

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