El hilo del que penden tus finanzas
Hay una práctica que por sí sola puede hacer una enorme diferencia en tu situación económica. Ésta es tener y mantener un fondo para emergencias.
Contar con un dinero para imprevistos hace posibles que tus, ojalá ambiciosos, planes financieros sean posibles. Con el respaldo de un fondo para emergencias, bien administrado, es posible aventurarse a poner un negocio, invertir en acciones o bienes raíces. Así en caso de cualquier eventualidad (que siempre suceden) puedes recibir el golpe, evitando así que aquello que hayas construido se derrumbe como un castillo de naipes.
Si comparamos tus finanzas personales a tu estado de salud física, el fondo para emergencias bien podría equivaler a tus anticuerpos. Me gusta mucho esta analogía por que es cierta en muchos sentidos.
Cuando enfermamos nuestros anticuerpos son lanzados a combatir la infección. En éste proceso nuestras defensas se desgastan y deben recuperarse antes de que la próxima enfermedad nos ataque. De otro modo nos encontraríamos demasiado débiles para defendernos de ella.
Así mismo funciona el fondo para emergencias. Cuando algún problema o accidente nos ocurre es éste dinero es que nos ayuda a solventar los posibles gastos. Entre mayor sea tu fondo de emergencias mayor es el número de eventos adversos que puedes enfrentar. De igual modo que en nuestro cuerpo, entre mayor cantidad de anticuerpos y salud física en general tengamos, con mayor facilidad y rapidez podemos recuperarnos.
Otro punto, y éste es muy importante, es que una vez que gastas una parte o todo tu dinero para imprevistos lo primero que debes hacer es recuperarlo en su totalidad. El cuerpo es sabio, durante y después de una enfermedad la mayor prioridad es recuperar la capacidad del sistema inmune para curarnos. No hay otro proceso que tenga mayor importancia que esto.
De igual modo debemos hacer con nuestro dinero. Si ya has gastado parte de nuestro fondo de emergencias tu primera prioridad es recuperarlo en su totalidad. Durante éste tiempo suspende pagos innecesarios en su totalidad, gasta sólo en lo necesario y mantén el pago de deudas a penas por encima del mínimo para que no generen intereses. Es muy importante que repongas tu fondo de emergencias como si tu propia vida dependiera de ello.
Como mencionamos antes, si no tienes suficiente dinero a la mano para imprevistos es como si tu cuerpo no tuviera sistema inmune o éste fuera muy débil. Hay una enfermedad muy cruel que puede producir ése mismo efecto: el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida.
¿Ya estás convencido de que necesitas un fondo para emergencias?
¿Cómo comenzar un fondo para emergencias?
Lo que recomienda Dave Ramsey es hacernos con $1,000 dólares como fondo de emergencias mínimo. De ningún modo ésta cantidad es suficiente para hacer frente a problemas económicos grandes pero bien puede servirnos de apoyo para sobrevivir hasta que nos hagamos de un fondo para imprevistos completo.
Conseguir el dinero para nuestro fondo para emergencias mínimo es una emergencia por sí misma y es primordial que lo consigas lo antes posible. De ser necesario convendría vender algunas de nuestras pertenencias para completar éste dinero.
El fondo para emergencias completo debería permitirte solventar todos tus gastos por al menos 6 meses, en el supuesto de que te quedaras sin una fuente de ingresos. Lo ideal es que, eventualmente, tu fondo para emergencias aumente hasta cubrir un año o más de tus gastos.
Mantenimiento
Mantener tu fondo de emergencias es muy importante ya que, como todas las cosas en la vida, es susceptible al desgaste. Algunas cosas que es importante tener en cuenta:
Contar con un dinero para imprevistos hace posibles que tus, ojalá ambiciosos, planes financieros sean posibles. Con el respaldo de un fondo para emergencias, bien administrado, es posible aventurarse a poner un negocio, invertir en acciones o bienes raíces. Así en caso de cualquier eventualidad (que siempre suceden) puedes recibir el golpe, evitando así que aquello que hayas construido se derrumbe como un castillo de naipes.
Si comparamos tus finanzas personales a tu estado de salud física, el fondo para emergencias bien podría equivaler a tus anticuerpos. Me gusta mucho esta analogía por que es cierta en muchos sentidos.
Cuando enfermamos nuestros anticuerpos son lanzados a combatir la infección. En éste proceso nuestras defensas se desgastan y deben recuperarse antes de que la próxima enfermedad nos ataque. De otro modo nos encontraríamos demasiado débiles para defendernos de ella.
Así mismo funciona el fondo para emergencias. Cuando algún problema o accidente nos ocurre es éste dinero es que nos ayuda a solventar los posibles gastos. Entre mayor sea tu fondo de emergencias mayor es el número de eventos adversos que puedes enfrentar. De igual modo que en nuestro cuerpo, entre mayor cantidad de anticuerpos y salud física en general tengamos, con mayor facilidad y rapidez podemos recuperarnos.
Otro punto, y éste es muy importante, es que una vez que gastas una parte o todo tu dinero para imprevistos lo primero que debes hacer es recuperarlo en su totalidad. El cuerpo es sabio, durante y después de una enfermedad la mayor prioridad es recuperar la capacidad del sistema inmune para curarnos. No hay otro proceso que tenga mayor importancia que esto.
De igual modo debemos hacer con nuestro dinero. Si ya has gastado parte de nuestro fondo de emergencias tu primera prioridad es recuperarlo en su totalidad. Durante éste tiempo suspende pagos innecesarios en su totalidad, gasta sólo en lo necesario y mantén el pago de deudas a penas por encima del mínimo para que no generen intereses. Es muy importante que repongas tu fondo de emergencias como si tu propia vida dependiera de ello.
Como mencionamos antes, si no tienes suficiente dinero a la mano para imprevistos es como si tu cuerpo no tuviera sistema inmune o éste fuera muy débil. Hay una enfermedad muy cruel que puede producir ése mismo efecto: el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida.
¿Ya estás convencido de que necesitas un fondo para emergencias?
Image: Grant Cochrane / FreeDigitalPhotos.net |
¿Cómo comenzar un fondo para emergencias?
Lo que recomienda Dave Ramsey es hacernos con $1,000 dólares como fondo de emergencias mínimo. De ningún modo ésta cantidad es suficiente para hacer frente a problemas económicos grandes pero bien puede servirnos de apoyo para sobrevivir hasta que nos hagamos de un fondo para imprevistos completo.
Conseguir el dinero para nuestro fondo para emergencias mínimo es una emergencia por sí misma y es primordial que lo consigas lo antes posible. De ser necesario convendría vender algunas de nuestras pertenencias para completar éste dinero.
El fondo para emergencias completo debería permitirte solventar todos tus gastos por al menos 6 meses, en el supuesto de que te quedaras sin una fuente de ingresos. Lo ideal es que, eventualmente, tu fondo para emergencias aumente hasta cubrir un año o más de tus gastos.
Mantenimiento
Mantener tu fondo de emergencias es muy importante ya que, como todas las cosas en la vida, es susceptible al desgaste. Algunas cosas que es importante tener en cuenta:
- Mantén éste dinero en efectivo o en una cuenta de ahorros con tarjeta de débito. Esto para que siempre puedas disponer de el con facilidad. Nada de invertir éste dinero en pagarés a 28 días o algo por el estilo.
- Mantén éste dinero en una cuenta separada de tus cuentas de nómina y ahorros personal. De éste modo pones un límite claro entre lo que es para emergencias y el resto de tu dinero.
- Conviene cada año crecer tu fondo para emergencias en un 5% (o más si la inflación en tu país es mayor).
- Cuando llegues a gastar parte de éste dinero pon tu sistema financiero en alerta. Enfócate en recuperar el dinero gastado como primera prioridad.
- No te permitas a tí o a tu familia gastar éste dinero en cualquier cosa que no sea una emergencia.
- Tu fondo te acompañará fielmente toda tu vida. Al final, su último y más noble propósito será pagar tus propios gastos funerarios.
Crear un fondo para emergencias es el primero de los siete pasos propuestos por Dave Ramsey para lograr la Libertad Financiera. ¿Quieres conocer éste sistema? Sí, quiero saber más.